Hoy me levante pensando en las cosas que
hago, las cosas que entrego y las que permito, creo que he estado actuando de
una forma que no me beneficiaba en lo absoluto, entregando mis sentimientos y
mi vida a personas que no han sabido valorar lo que les doy porque simplemente
son personas que tienen miedo de dejar que alguien con verdaderos valores y
sentimientos sea parte de su vida, porque se han acostumbrado a estar al lado de
personas que fingen quererles, y se han acostumbrado a esperar en las sombras.
Hoy tras pensarlo mucho me di cuenta que no
he sido apreciado, ni me he apreciado yo mismo, porque he cedido a personas y situaciones
que han marcado mi vida de forma negativa, hoy he comprendido que he estado
buscando donde no hay, me he mantenido esperando lo que no llegara, he permitido
que los demás se adueñaran de mis sueños y mis emociones, solo por sentir que
era apreciado, viviendo de migajas.
Hoy he visto la luz, no solo la externa, también
la interna, esa que brilla en mi sin que siquiera lo note, entonces me ha hecho
ver que para ser apreciado por los demás, debo empezar a apreciarme primero, he
descubierto que tengo mucho que dar y que no debo entregarlo a aquellos que no
entienden un sentimiento verdadero, porque quien no conoce un sentimiento efímero,
tampoco puede apreciar un sentimiento eterno, mucho menos uno real y sin poses,
simplemente porque no conoce nada y tampoco se da el permiso de conocer aquello
a lo que teme.
He estado sujeto a las manos equivocadas,
esperando que gente sin gracia aprenda a valorar lo que les doy, soñando con
ser amado como el pinocho que soy, mas tal vez sin amar mi interior, y es por
eso que decidí en vez de esperar de las mascaras, en vez de aceptar las poses,
alejarme de aquellas muñecas de trapo que temen ser reales porque simplemente
prefieren vivir entre las sombras.
Puede parecer un disparate pero, así me
siento hoy.
Haz espacio para aquellos que si quieren
estar en tu vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario