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jueves, 25 de marzo de 2010

Vicky Cristina Barcelona


Es asombroso como nos pasamos la vida complicándolo todo, buscando donde no debemos lo que creemos necesitar. Añoramos amar a alguien más allá de lo que deberíamos amarnos a nosotros mismos, soñamos con tener cosas que al final no llenan el vacio existencial que cargamos en nuestro interior. Viendo la película Vicky Cristina Barcelona, comencé a pensar en algunas cosas, y creo que a veces no es suficiente con amar perdidamente a la persona que está a nuestro lado, por que a veces aunque esa persona nos ame profundamente, y la amemos por igual, no es lo que nos hace bien.

A veces nos aferramos tanto a cosas que nos hieren solo por el miedo de empezar otra vez, de conocer cosas nuevas, experimentar sentimientos nuevos, o simplemente por miedo a descubrir a personas que están a nuestro alrededor desde hace tiempo. Le permitimos a la persona que esta a nuestro lado que nos haga daño, que nos lastime y juegue con nosotros, poniendo por debajo de todo, nuestros propios intereses, nuestros sueños y nuestro amor propio. El amor trabaja en conjunto con otros sentimientos, con otras cosas, es como el ingrediente principal dentro de una receta, no puede faltar, pero tampoco pueden faltar los demás ingredientes, por que entonces no hay equilibrio.

Todos buscamos el equilibrio perfecto y muchas veces lo buscamos en otras personas y no dentro de nosotros mismos, antes de amar a alguien, de entregarse, hay que encontrar esos ingredientes que junto con el amor conforman esa receta mágica que todos buscamos en los demás, pero dentro de nosotros no.

En el amor no deben existir planes, o nos pasaría lo que a Vicky, que a pesar de tener todo lo que había querido siempre no se sentía completamente llena, feliz. El amor hay que vivirlo cada instante como si se estuviese tomando la última gota de un sabroso elixir, sin desperdiciar nada.

Creo que es incorrecto o mejor dicho no es factible buscar copias de las personas que estuvieron en nuestro pasado, aún así la hayamos amado inmensamente, si ya no están con nosotros es por algo, tal vez por que el tiempo que debieron permanecer en tu vida ya termino, tampoco debemos mantener vínculos con aquellos que alguna vez amamos pero que de algún modo nos lastimo, perdonar el error, el daño, es lo mejor, luego dejar ir, para aprender de lo sucedido.

Son tantas las cosas que puedes aprender en un segundo, en un momento, solo hay que mirar dentro de si mismo, luego a nuestro alrededor, Dios no hace disparates y todo lo que nos sucede, pasa para que aprendamos algo. La vida es más sencilla de lo que podemos creer pero nos pasamos el tiempo complicándolo todo... Vean la película tal vez se me quedo algo, por aprender.

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